Al norte del municipio de A Fonsagrada se encuentran dos de los senderos más interesantes de Galicia: el PR-G 139 y el PR-G 140, conectados entre sí, y que destacan por la calidad de unas sendas abiertas exclusivamente para llegar a lugares inaccesibles de la Reserva de la Biosfera Río Eo, Oscos e Terras de Burón.

El PR-G 139 discurre por caminos y antiguas corredoiras que suponen un retorno al pasado, lleno de testimonios etnográficos y culturales: molinos, corripas (construcciones circulares para el almacenamiento de castañas), serrerías de madera... etc.

El inicio se encuentra en la aldea Vilardíaz, punto más elevado del recorrido, desde aquí la ruta desciende en dirección noroeste hacia el valle del río Logares, hundido en la espesura del bosque caducifolio. Entre la gran diversidad natural sobresalen los magníficos ejemplares de tejo a lo largo del camino de San Martín de Robledo. Los dos únicos edificios de esta aldea, la iglesia y la casa rectoral blasonada, llamarán a atención del caminante.

En la aldea de Romeán, a la que llegaremos siguiendo la derivación y erigida a pie del castro del mismo nombre, podremos ver un hórreo característico de esta zona. La senda continúa paralela al río recorriendo los meandros donde se forman hermosos saltos de agua. El atrevido diseño del trazado nos ofrece fabulosas perspectivas del río a diferentes alturas, todas ellas acondicionadas para dar seguridad al caminante. Nos alejaremos del río para comenzar el ascenso de regreso hacia Vilardíaz, zigzaguearemos por la montaña y tendremos fabulosas perspectivas del valle del río Veiga.