Construida a mediados del siglo XX, sustituye al Santuario de San Roque que se ubicaba en el mismo lugar, pero con el acceso de entrada orientado  hacia el puente. Su arquitectura presenta una planta de nave única y con cubierta a tres aguas. En el exterior destaca en volumen y proporciones el campanario en la parte central del edificio. 

Destacar la decoración interior que posee al contar con los retablos mayores y de la Virxen do Rosario, ambos de alto valor artístico, de estilo neoclásico y obra de Xosé Ferreiro y de su taller respectivamente. También es de notable importancia el retablo de la Virxe de Guadalupe y de la Virxe do Carmen, que hacen que esta iglesia sea un punto de interés para rutas culturales de arte religioso.

Frente a la entrada de la iglesia podemos apreciar una singular reproducción de la Fuente de los Leones de la Alhambra.