Para Pereira Molares "la iglesia responde al modelo de planta longitudinal, con cabecera cuadrangular, ligeramente más estrecha y alta que la nave. En el muro lateral sur del templo se dispone la sacristía. Todo el conjunto es de cantería.

La fachada principal dibuja el clásico esquema pentagonal, flanqueado por  pilastras laterales, elevándose sobre lo costal izquierdo un fuerte campanario de planta cuadrada. Este paramento frontal aparece dividido en dos cuerpos, situándose en el inferior la puerta de entrada, de arco con dintel, flanqueada por  pilastras jónicas, que resultan excepcionales en la arquitectura del marco geográfico que nos ocupa. Sobre estos soportes corre un friso, decorado con una jugosa decoración de carácter vegetal, disponiéndose en su centro, de una gruesa hoja de acanto que ocupa también la clave de la puerta. Todo este conjunto de elementos configura una entrada de gran originalidad. Finaliza esta entrada un frontón triangular partido, que alberga una hornacina con la imagen de San Ramón.”