Los romanos pensaban que este era el punto más occidental de la tierra y, por tanto, el mundo se acababa aquí. Era el "finis terrae" ¿Por qué alguien querría ir al fin del mundo?
Tal vez porque Cabo Fisterra esconde el verdadero secreto de la Costa da Morte: paisajes agrestes y playas impresionantes, unas (al abrigo del cabo) de aguas tranquilas y otras de fuerte oleaje como Mar de Fora, una de las playas más salvajes de Galicia. Y la gran atracción de todos los tiempos, la puesta de sol sobre la inmensidad del óceano, el mar del fin del mundo.