El Hórreo de Matío, en la parroquia de San Simón de Nande, era conocido como el hórreo del cura, pues pertenecía a la parroquia, ya que está a un lado de la casa rectoral.

Es el hórreo más grande y mejor conservado del ayuntamiento de Laxe. Se trata de un hórreo con buena cantería de granito, en el que antaño se conservaba el grano que se daba a la Iglesia como tributo o diezmo. Tiene una pequeña puerta de entrada para los gatos con el fin de mantener controlados a los ratones, un pináculo como elemento pagano para que las cosechas fueran abundantes, y la cruz para bendecir y proteger la cosecha.