Fragas do Eume es uno de los bosques atlánticos de ribera mejor conservados de Europa. Dentro de sus 9.000 hectáreas de extensión viven menos de 500 personas, lo que da una idea del estado virgen de estos exuberantes bosques que siguen el curso del río Eume. El parque tiene la forma de un triángulo cuyos vértices y fronteras serían As Pontes, Pontedeume y Monfero.
La mejor forma de conocer el parque es a pie. Así, si uno sabe ver, quizá descubra a los juguetones duendes que habitan en él. Robles, chopos, fresnos, alisos, más de 20 especies de helechos y 200 de líquenes se dan aquí. A veces la vegetación es tan tupida que apenas deja pasar la luz. Pero este bosque umbrío y secreto es generoso como sus aguas, fuentes y cascadas. Aquí no hay verde, aquí hay paisajes de mil verdes. Y escondido en el corazón del bosque, el monasterio de Caaveiro, un antiguo cenobio con más de 10 siglos de historia y unas vistas espectaculares de esta "fraga" mágica.