Cruceiro sobre tres escalones de piedra cuadrados, el primero ahogado en el asfalto. Por la cara delantera de la basa, aparece un retablo que contiene dos personas entre las llamas, flanqueadas por San Francisco y San Antonio, que les tienden el cordón de su hábito al que ellas se agarran. La basa posee cantos ligeramente rebajados, que conducen al fuste de planta, primero cuadrada y luego octogonal, en el que aparecen varios santos. Por la parte delantera está San Antonio y Santa Marina; por detrás, la imagen de Santa Bárbara. La cruz es cuadrada, con Cristo crucificado, y detrás de él, la Virgen María, en su advocación del "Socorro", ya que lleva en la mano un palo para defender al Niño que sube por su falda, escapando del demonio que se encuentra vencido a sus pies.