Descripción
Entre las puntas de Estaca de Bares, por el norte,
y el Cabo Ortegal, los vértices más septentrionales de
la Península Ibérica -"de fino y agudo dibujo de
lanza" el primero y "abombado Ortegal", el segundo,
en palabras de Otero Pedrayo- se abre la boca de la
amplia ría de Ortigueira y de su apéndice del
Ladrido. Frente a él, la Isla de San Vicente.
Este brazo de mar, un amplio abanico que
penetra hacia el sur, aparece encajado entre la Serra
da Capelada, al oeste, y la Serra da Faladoira, al este.
Por el sur la ría se convierte en marisma a medida
que se acerca a la desembocadura de los ríos Mera y
Baleo.
La suavidad de las temperaturas a lo largo del año
y la abundancia de precipitaciones explican la
exuberante vegetación y la riqueza de manzanos que,
en el sector de Mera, se convierten en su elemento
distintivo.
Las villas de Ortigueira, en la margen oriental, y
Cariño, en la occidental, canalizan la actividad
económica de la comarca. La primera, capital del
antiguo condado de origen medieval, es más
comercial y turística; la segunda, puerto de
importancia, vive de la pesca y de su transformación
industrial. Junto a ellas destaca el puerto de
Espasante, otro lugar en el que las actividades
pesqueras son prioritarias.