Precisamente esta parte oriental de la Serra de Pena Forcada se extiende desde Traba de Laxe hasta la punta de cabo Vilán, nuestra siguiente parada en el territorio de Camariñas. En este escenario pétreo y, en cierta manera intimidante por la fuerza con la que el aire lo asola, se levanta otro de los faros más conocidos de A Costa da Morte, tanto por su estructura como por su situación, y que actualmente acoge el Museo dos Naufraxios. En la visita a la exposición, conoceréis de cerca los faros y sus secretos y sabréis por qué la belleza de este lugar contrasta con su extrema peligrosidad. En este tramo de costa se contabilizan más de 150 hundimientos; el más conocido es el del buque militar inglés HMS Serpent, el 10 de noviembre de 1890. Excepto tres supervivientes, que consiguieron llegar malheridos a la costa, los restantes 172 tripulantes se enterraron en el conocido como “Cementerio de los Ingleses”. Subid hasta la antigua antorcha, situada a espaldas del faro actual, de 1896. Desde aquí veréis en toda su magnitud la torre octogonal de cabo Vilán. Ahí tenéis al “Cíclope” de A Costa da Morte, que se eleva 105 metros sobre el mar para lanzar su señal luminosa a todos los buques que navegan por estas aguas. Este fue el primer faro eléctrico de las costas españolas. Otra curiosidad es el túnel cubierto que une el edificio de los fareros con la linterna por uno de los lados del acantilado.