Iglesia parroquial de estilo románico que fue iglesia de un monasterio benedictino femenino. Es una verdadera joya de este estilo arquitectónico pese a las grandes reformas que sufrió en 1809. Consta de una sola nave y ábside rectangular. La fachada occidental está flanqueada por una torre que data de dicha reforma. La portada principal se abre bajo cuatro arquivoltas sostenidas por cuatro pares de columnas. La decoración empleada consiste en: la exterior con rosetas rematada por una vuelta de tacos, la segunda vegetal, la tercera de tallos con hojas y la cuarta de dos medias cañas con bolas. La fachada norte presenta una amplia variedad de canecillos historiados, al igual que la fachada sur repitiendo una serie de temas: cabeza de animal, cuadrúpedos, cápridos, hojas en espiral, cabeza de monstruo, cabeza humana. En el ábside también se disponen una buena muestra de canecillos bajo su cornisa. Ya en el interior del templo se conservan en su nave doce ménsulas, seis a cada lado, que servían de apoyo a las primitivas cerchas de madera. El arco triunfal es semicircular, ligeramente de herradura en su arranque. El capitel norte representa un personaje con toga que yace prisionero de otros dos. Dos monos se agarran al collarino. El capitel sur es de hojas rizadas. El ábside se cubre con una bóveda de cañón de mampostería a partir de los riñones y sillares en su arranque.